Querida abuela
al marcharte te has llevado mi sonrisa
y todo lo bueno
has dejado un gran vacío
Ahora la casa está fría
oscura y sin vida
y cada rincón te echa de menos.
Querida abuela
no puedo acostumbrarme a tu ausencia
querría que todo fuese solo una pesadilla
Aún no sé cómo sobrellevaré tu pérdida
Solo tus recuerdos me darán la fuerza que ahora me falta